Compartiendo un Momento con Papá

Cada papá es único, especial e irrepetible. Dentro del núcleo familiar, es una piedra angular o una columna, que da forma y soporta a su entorno. Como cada año, estamos casi “ad portas” de celebrar su día. Es ahí que nos ponemos a pensar en qué cosas podemos hacer, para que papá la pase fenomenal en esa fecha. Las opciones son muchas y muy variadas, cada una, con la capacidad de generar un cúmulo de recuerdos y anécdotas, que, en un futuro, seguramente, nos alegrará recordarlos. No necesitamos cosas muy elaboradas o sofisticadas para generar un grato momento. Sabemos que nuestro papá sabrá valorar el gesto.

Compartiendo un Momento con Papá

Está vez no vamos a recurrir al divertido pero muy utilizado “lugar común” de qué vino regalar si tu papá es: deportista, aventurero, divertido, moderno, conservador, intelectual y etcéteras. No, esta vez propondremos una temática menos elaborada, algo más simple pero contundente. Sólo para darles un ejemplo, una vez, con un grupo de amigos, pasamos un extraordinario momento, compartiendo una botella de vino, una hogaza de pan y un poco de aceite de oliva. Así de simple. No necesitan nada más que esas tres cosas (¡y el sacacorchos también!).

Busquen, averigüen o indaguen qué le gusta tomar o comer a papá. Vinos, destilados, licores, fiambres, quesos, patés, panes, empanadas. Una vez definido el “qué”, consigan un poco de información del producto: procedencia, cómo se elabora, cuáles son sus características principales, cómo se sirve o con qué se toma o se come, temperatura de servicio, entre otros. Todo esto nos ayudará a hacer única la ocasión y a enriquecer la conversación. La otra opción es salir de la zona de confort de papá y llegar con algo novedoso. Pero para esto, necesitamos un buen sustento o historia para que se arriesgue a dar un paso dentro de lo desconocido.

Si se trata de compartir una botella de vino tinto, podemos elegir una que provenga de estas uvas o de sus “blends”, aquí les proporcionamos nuestras favoritas: Cabernet Sauvignon, Malbec, Tempranillo, Pinot Noir, Merlot y Syrah. Un segundo grupo sería: Sangiovese, Carmènere, Cabernet Franc, Garnacha, Monastrell y Tannat. Las catalogamos de acuerdo con su capacidad de acondicionarse a diversos paladares y a su disponibilidad en el mercado.

Para vinos blancos, la elección sería con las siguientes uvas: Chardonnay, Sauvignon Blanc, Viognier, Pinot Gris, Verdejo, Viura/Macabeo y Torrontés. Elíjanlas si por ahí se cruzan con alguna de ellas: Alvariño, Riesling, Semillon, Chenin Blanc, Muscat, Gewurztraminer.

Nuestro mercado nos permite cierta flexibilidad para elegir procedencias: Argentina, España, Chile, EUA, Australia, Italia, Francia, Portugal, Alemania, Sudáfrica. Cada país posee sus zonas y, éstas, a su vez, cuentan con “terroirs” específicos para elaborar vinos de gran calidad. Es importante que vayamos a nuestra tienda especializada o cava preferida, teniendo ya preestablecido lo que queremos adquirir.

Un rápido repaso de los artículos de nuestro blog colaborará positivamente para saber qué escoger y cómo combinar lo elegido. No sólo de vinos, sino también, de destilados, licores y delicatessen. Siempre y cuando mantengamos todo bajo el ámbito de la simplicidad.  En La Canastería estamos dispuestos, como siempre, a ofrecerles una guía profesional para mejorar esa experiencia de regalar y compartir.

Llego el momento de hacer un brindis por la felicidad de todos los papás del Perú. ¡Salud!

Roberto Viacava Duffy, Sommelier peruano y Consultor en Vinos. Colaborador de La Canastería.